28 sept 2016

Un millón de gotas - Víctor del Árbol - Destino

He de decir que esta historia me ha sorprendido mucho, sobretodo el final. En ningún momento de la lectura me lo he esperado, es de esas historias que te quedas pensando... ¿todo esto ha ocurrido en la vida real?
Se entrelazan varias historias, de distintas épocas, muy bien narrado y con un estilo que me ha sorprendido teniendo en cuenta que es la primera novela de este autor que leo, y que no será el último libro suyo que lea claro.
Si he de destacar algo que más me ha gustado, ha sido las innumerables referencias históricas que llenan el libro sobre la Guerra Civil y la II Guerra Mundial, la historia de la Unión Soviética, y la velada triste historia que hay en el pasado, claro como en toda guerra.
Solo deciros que me ha enganchado, y que paso a recomendar esta novela.


26 sept 2016

Un momento con Eduardo Alzola.

Buenas tardes, Eduardo Alzola. Antes que nada te doy la bienvenida a este pequeño rincón de la red y te pido que digas los títulos de tus obras.
E.A: una pregunta muy fácil para empezar. Muy fácil y muy breve. De momento solo he escrito una novela, titulada Un billete para el infinito. La publicó Ediciones Beta III Milenio en 2013.
He de decir que tu obra Un billete para el infinito me encantó. Seguro que has tenido muy buena crítica...
E.A: no puedo quejarme. Estoy muy satisfecho de la reacción de los lectores. Aunque está un poco lejos de ser un superventas el libro ha gustado bastante.
Como buen libro se acabó la tirada, ¿qué se siente al cumplir las expectativas de la tirada inicial? ¿Algún secreto para autores que no la hayan agotado?
E.A: es muy satisfactorio ver que a la gente le gusta lo que has escrito, lo compra y lo recomienda, aunque creo que no soy la mejor referencia para dar consejos de marketing. Mi trabajo me deja poco tiempo para escribir y aún menos para promocionar lo que escribo, salvo alguna cosita breve en las redes sociales.
En una opinión sobre Un billete para el infinito, qué es lo que más valoras...
E.A: el mejor regalo que te pueden hacer cuando eres escritor, sobre todo si estás empezando, es una crítica sincera, que te ayude a percibir tu obra desde la objetividad. No te quiere más quien más te adula, sino quien más te ayuda, aunque te haga llorar, como en el refrán. Las opiniones sinceras son las que te hacen mejorar, crecer…, incluso dejarlo a tiempo, si es el caso.
Ese título..., que he de decir que muy bien escogido, ¿te costó mucho decidirte por él?
E.A: desde el principio tuve claro que la escena final de la novela se desarrollaría en la estación de Abando, en Bilbao, donde uno de los personajes toma un tren. En los andenes de la estación hay una escultura de Agustín Ibarrola titulada “Viaje al infinito”, que es la que me dio la idea para el título. Así que tuve el título antes que la historia y no, no me costó.
Yo sé que además estás contento con el trabajo hecho en lo referente a la portada...
E.A: muy contento. Le di muchas vueltas al tema de la portada y tenía unas cuantas ideas que estuve discutiendo con mi editora. Cuando me llamaron para ver el primer borrador me entró bastante inquietud. La portada es habitualmente lo primero que ve el lector potencial y tiene que ser atractiva y yo, como autor, necesitaba sentirme identificado con ella. En cuanto vi la propuesta suspiré satisfecho. Me encantó.
Ahora vamos con tus relatos, dinos los títulos y en qué antologías están publicados...
E.A: curiosamente lo primero que publiqué no salió en papel sino en la tele. Fue en 2009, un relato que presenté al concurso de relatos hiperbreves de Página 2 de Televisión Española. Se titulaba “Los vivos no existen” y tenía veintitrés palabras. Posteriormente he publicado tres relatos breves: “Por favor, que no haya sido un sueño” (Un lugar mejor y otros relatos, III Premio Ediciones Beta de Relato Corto, 2009), “La tentación de la carne” (Mezcla de lejía y crema y otros relatos sobre mi primera vez, V Premio Ediciones Beta de Relato Corto, 2013) y “Algún día serás yo” (Entre tantos, II Certamen de relato y poesía Bohodón Ediciones, 2013).
¿Tienes alguno favorito? ¿Del que te sientas más orgulloso?
E.A: Le tengo un cariño especial a “Por favor, que no haya sido un sueño”. Fue el primer relato que escribí y lo primero que publiqué, aparte del microrrelato. Es algo muy bonito ver algo tuyo publicado por primera vez.
En relación con el microrrelato, ¿cómo se siente que te mencionen en un programa literario de esa talla a nivel nacional?
E.A: mandé el microrrelato al concurso sin pensar ni por lo más remoto que lo fueran a emitir, así que cuando un domingo veía tranquilamente el programa y vi mi nombre en la pantalla mientras una voz en off leía mi texto me quedé sin palabras. Me hizo una ilusión enorme.
Un personaje favorito en tus historias...
E.A: no sé si tengo un personaje favorito. Si tuviera que elegir, de los publicados me quedaría tal vez con la enfermera Jones, de “Un billete para el infinito”.
Y el más odiado..., el que más te haya costado soportar...
E.A: ese lo tengo más claro: el doctor Luis María Sánchez Ganapán, también de “Un billete para el infinito”. Está basado en una persona real que se cruzó en mi vida en una cierta época muy especial. Un tipo que era, además de malo, maloliente.
¿Una lectura o autor que recomiendes?
E.A: recomiendo una novela, de un autor aún no demasiado conocido, espléndidamente escrita, que cuenta una historia intrigante y estremecedora ambientada en el desastre de Chernobyl. Se trata de “La muerte invisible”, de Alberto Pasamontes.
Una ciudad que te inspire...
E.A: casi todos los sitios tienen algo de inspirador. Procuro ambientar mis historias en lugares que conozco. Eso las hace más reales, ya que mi trabajo no me deja demasiado tiempo para documentarme sobre lugares desconocidos. Aunque no se menciona, parte de “Un billete para el infinito” transcurre en Bilbao, la ciudad donde nací y donde he pasado buena parte de mi vida. La novela que estoy escribiendo ahora transcurre entre Vitoria y otros sitios de Álava, Bruselas y Burdeos.
¿Escribes a mano o a ordenador?
E.A: a ordenador, siempre a ordenador. Sería incapaz de escribir a mano, entre otras cosas porque tendría serios problemas para entender yo mismo mi letra. No quiero ni imaginarme lo que sería un cuaderno manuscrito y corregido por mí.
Género que te gustaría escribir y aún no hayas hecho...
E.A: no sé. Cuando escribo no pienso en géneros. Como autor de una novela temo ese momento en el que te preguntan de qué va tu novela o de qué género es. De momento, en lo que se refiere a “Un billete para el infinito”, no he sabido responder a ninguna de las dos cuestiones. Tampoco me preocupan demasiado las etiquetas. Yo escribo y, si a alguien le interesa, que clasifique.
Por último, dinos si tienes algún proyecto cercano en mente, y algún dato que nos puedas desvelar.
E.A: llevo bastante tiempo con una novela entre manos. La tengo a medio escribir, pero estoy muy atascado. El trabajo y otras circunstancias de la vida me mantienen falto de inspiración y de tiempo, aunque espero coger ritmo lo antes posible. Ya he contado antes los lugares en los que transcurre, pero no puedo desvelar más. Pretende ser una reflexión sobre el bien y el mal.
Gracias por visitar mi humilde blog, no dudo que en breve escucharemos mucho hablar sobre un escritor de tal calibre como Eduardo Alzola.

E.A: gracias a ti, Víctor. Siempre es un placer compartir contigo una charla, un café, una novela, una entrevista o lo que sea.

Un Billete para el infinito.


Un condenado a muerte aprovecha sus últimos días para escribir la historia de su vida. Su relato comienza con un sueño en el que se ve a sí mismo dentro de un cubo transparente que flota en el espacio. Este sueño, que le ha acompañado a lo largo de su vida, es un reflejo de su absoluta incapacidad para relacionarse con los demás.
¿Te imaginas despertar un día con la mente totalmente vacía, no saber quién eres, ni de dónde vienes, ni dónde estás?, ¿te imaginas ser el conejillo de indias de un científico sin escrúpulos y encontrarte atrapado en tu propio mundo interior?..., ¿te imaginas?
Déjate llevar por esta intrigante historia y acompaña al protagonista en la búsqueda de sí mismo, en su lucha por derribar las murallas que lo atrapan en su mundo interior y en su empeño por conseguir UN BILLETE PARA EL INFINITO.